El oficio del corta piedra ha sido en el fin de la antiguedad sobrevaluado, Escultor sin Arte. Obrero de cantera que corta la piedra y que trabaja con la punta de un cicel, para construir obras en serie. La unica capacidad que le ha sido atribuida es aquella de conoser el material que transforma. Saber donde marcar, para hacer los hoyos, para despues golpiar con el cincel, para cortar de la manera querida. El corte trincante o de espalda, debe seguir las venas y la persona corta piedra, observa bien la piedra antes de trabajarla. No solo esto sabe hacer y numerosas piezas, palacios y monumentos, contruidos con piedras locales o importadas son testimonios. Su obra maestra, son a menudo anonimas. Observandolas, pero con sensibilidad, se puede imaginar la fatiga de quien ha debido da a manoluchar contra la naturaleza hostil, se deberia proveer por medio de este oficio, lo necesario para mantener a la propia familia. Cuando el corta piedra, se dedica a laborar arte, que no sean solo de un perfil especifico, o de preparacion adoquinados, por las piezas y los cordones viales, sabe de haber adquirido arte, de haber mantenido a los hijos y de no deber mas producir, solo por la necesidad economica. Entonces sus nuevos trabajos seran pozos, fuentes, columnas, pilares, caminos, arcos decorados. Cortar a mano con la punta derecha, enblemas de familias, muros y fachadas, donde cada piedra puesta cuente el arte de la figura. La meta, no es solo una meta, pera tambien la capacidad en dialecto di laborar la piedra basta en manera ordenada y precisa. El mortero de cemento o cal, sera poca y servira, solo para construir una fuga regular. Porque El opus incertum, tendra la elegacia que la historia le tiene reservada. Hoy estamos lejos de ser un arte aburrido pero útil. Lo que fue y el patrimonio artístico y cultural se abandonan a la decadencia. Desde la posguerra, algunos de nosotros hemos tenido que emigrar para ejercer en otros lugares. Los gobiernos políticos o tecnocráticos controlados por las pseudo "Alianzas" atlánticas de nuestro hermoso país nos han ignorado y nos han arrebatado nuestra profesión, identidad y cultura. El capitalismo no siempre ayuda al desarrollo y conservación del patrimonio histórico, sino que sólo lo convierte en un fin en sí mismo sin tener en cuenta las cosas que no tienen precio en un país maravilloso como Italia.
Arte del corta piedra
